👨👩👧👦Recibir la noticia de que nuestro hijo ha golpeado a otro niño en la escuela resulta incómodo, y en ocasiones, nuestra reacción puede ser gritar o incluso recurrir a castigos físicos. Esto plantea una paradoja, ¿verdad?.
Por ello, es crucial reconocer en primer lugar las causas subyacentes que impulsan la agresividad infantil.
➡️Dificultades de comunicación:
Problemas o retrasos en el lenguaje pueden propiciar comportamientos agresivos en los niños.
➡️Baja tolerancia a la frustración y estrés:
Los niños sometidos a altos niveles de estrés o con poca capacidad para tolerar la frustración tienden a mostrar conductas más violentas.
➡️Exposición a escenas violentas:
La presencia de estas escenas puede influir en el aprendizaje y la imitación de modelos de comportamiento agresivo por parte del niño.
➡️Ejemplo de los padres:
Los niños aprenden por imitación, y si en casa se resuelven los conflictos con violencia, es probable que el niño perciba esta como una forma válida de manejar situaciones difíciles.
🌱Aquí algunas medidas para reducir la conducta agresiva
✔️ Comunicar a los hijos por qué los comportamientos violentos son inadecuados y perjudiciales, tanto para ellos como para los demás.
✔️Evitar en todo momento escenas violentas en el hogar.
✔️Ser un modelo de afrontamiento de situaciones difíciles a través del diálogo y la negociación, sin recurrir a la violencia, ya sea física o verbal.
✔️Enseñar con ejemplos reales otras alternativas para resolver conflictos.
✔️Evitar reforzar conductas agresivas con elogios o premios por ser «valientes».
✔️Reconocer y felicitar al niño cuando mantenga conductas apropiadas.
Si a pesar de seguir estas pautas, persisten las conductas agresivas, es recomendable que un especialista evalúe el comportamiento y proponga un plan personalizado de mejora. Como dijo el Dalai Lama: "El afecto, no la ira, es el medio para cambiar la opinión".
Con cariño, Psic Sarita Oliden 🌸